06-11-2020
Lectura 4.1. Monsiváis, Carlos (2000) AIRES DE
FAMILIA. Anagrama. España, capitulo “Desperté y ya era otro”, p. 155-180.
“Sáquenme de la
Latinoamérica” Monsiváis no hace referencia precisamente a esta frase por
razones temporales, pero me parece relevante hacer mención de este momo o meme
ya que tomándolo en un sentido serio se llegan a dos posturas o te quedas en tu
país y región a hacer lo mejor que puedas para mejorar como sociedad y dejar un
mejor futuro a tus hijos con el riesgo
de amanecer muerto porque la verdad que mostraste en una investigación afecta
los intereses de arriba o abandonas tu país de manera más involuntaria que
voluntaria a traviesas fronteras de manera ilegal en su mayoría arrieras tu
vida, tomas una decisión aceptando a la par sus posibles consecuencias tanto
negativas como positivas. Anhelando una vida digna y el hecho de que se tenga
éxito a veces suele ser más cuestión de suerte que fruto de la meritocracia, si
llegas a ser uno de los afortunados contados que tuvieron una movilidad social
ahora serás juzgado y criticado por los que están un poco por debajo tuyo a
nivel estatus económico. Latinoamérica tierra de los despojados de los conquistados
de los vencidos y sometidos, pero a la par lleno de riquezas naturales. Las
transformaciones sociales como la tecnología, el cine y la televisión le dieron
forma a la estructura social y brindaron un paradigma, el cine es parte de los
nuevos rituales al cual solo he tenido la oportunidad de asistir una vez y fue
por cuestiones académicas, las historias contadas en los grandes cines son los
nuevos historiadores, las películas nos enseñan de que va la vida, nos
reflejamos, nos identificamos con los actores o personajes por lo que somos o
por lo que podríamos ser. El cine es un modelo en él se revela lo que es
aceptado por la sociedad y lo que no. La televisión por su parte a pesar de los
años no se ha quedado atrás, las nuevas generaciones quizás no se informen a
través del noticiero que sus padres lo hacían pero lo hacen a través de las
redes sociales que son un mar de algoritmos en el que depositamos lo más
preciado el tiempo, en este mundo acelerado y lleno de productividad nos
tomamos el tiempo para discutir con extraños a través de una red social quizás
por aburrimiento o quizás por costumbre. La concepción de lo masculino y lo
femenino aunque la tendencia es que se está fragmentando aún existe bastantes
personas con ideas fijas de que las cosas son así y ya. La religión desde mi
agnosticismo considero que sigue teniendo un valor y un peso que repercute en
la vida de las personas de manera positiva y negativa ya sea fruto de los
extremistas o mal interpretaciones de los textos sagrados. La norma en exterior
es creer, tener un dios a quien culpar o a quien agradecer, mientras que a la
par de la caída del dios cristiano como dominante surge el dios individuo y el
dios riqueza o del mercado, los ritos ahora son experiencias excéntricas como
vivir por un día como si fueras millonario y después vuelve a tu lugar para
trabajar y sobrevivir de manera digna. Ya no necesitamos a un dios que nos
ordene ahora somos nosotros quienes nos autodisciplinamos, autocastigamos por
no esforzarnos lo suficiente, se duerme tarde y se levanta temprano porque tu
compañero de clase y mejor amigo también es tu competencia a nivel estadístico
ya sea por obtener un empleo una vez egresado o por mantener el que ya se
tiene. Para finalizar el internet esa invención que nos ha traído tantos
beneficios y que hay quienes llaman la era de la información, en la que las
brechas de desigualdad son invisibles porque antes de contratar internet se
debe comer, se debe tener lo básico, después vendrá la inteligencia artificial
y desplazara al taxista que te hacia platica de camino a casa.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario